La tierra puede estar compuesta por arcillas, limos, arenas y gravas.

Las gravas, gravillas, arenas y limos inorgánicos, los materiales granulados de la tierra, se denominan áridos y carecen del comportamiento elástico de la arcilla.

Arcilla[1]

Coloide de partículas extremadamente pequeñas (< 0,002 mm) y superficie lisa (¿micelas de la fase dispersa?); roca sedimentaria compuesta por agregados de silicatos de aluminio hidratados procedentes de la erosión de rocas que contienen feldespato —p. ej.: granito— y otros minerales. Silicato hidratado de alúmina:

 

Compuestos químicos que acompañan a las arcillas les dan colores característicos:

  • Hierro hidratado   y otros compuestos de hierro: amarillo, rojo
  • Manganeso: marrón
  • Cal, magnesio: blanco
  • Sustancias orgánicas: marrón oscuro, negro

De los muchos tipos de arcillas, las mejores para la construcción con superadobe son las que mojadas se sienten pegajosas, plásticas y fácilmente modelables sin agrietamiento. Los suelos con 5-30 % de arcilla son idóneos.

Elemento conglomerante de la arena y la grava: pega las partículas mayores en la tierra. Equivalente al cemento en el hormigón. Limo, arenas y gravas son rellenos en la tierra.

Al mojarse, la arcilla es pegajosa y resbaladiza al retener agua en su estructura: al formarse, las partículas coloidales adsorben iones de la fase dispersante —agua— y se cargan eléctricamente, todas con la misma carga, por lo que se repelen entre sí y no se unen. Una vez saturada, es impermeable. La arena y la grava no cambian al mojarse.

Microscópicamente, la arcilla está compuesta por minúsculas placas que se alinean superpuestas como escamas al manipularla (compactación) y rodean y envuelven los materiales más gruesos (arenas y gravas).

Arcillas lateríticas[2], poco expansivas

Idóneas para construcción y acabados.

Se dilatan mínimamente al mojarlas: 50 %.

Concentración alta de óxidos e hidróxidos de hierro.

Suaves y pegajosas al tacto.

Arcillas expansivas[3]

Apropiadas para:

  • recubrir estanques
  • caras enterradas de muros de retención
  • sellar la primera capa de un tejado vivo o de un domo enterrado

Dilatación grande al mojarlas: 100-200 %.

Viscosas y geletinosas al tacto.

Arcillas primarias, residuales

El yacimiento se halla en el mismo lugar donde se originó la arcilla: caolín.

Arcillas secundarias, sedimentarias

Arcillas que se han desplazado después de su formación: caolín secundario, arcilla refractaria, arcilla de bola, barro de superficie, gres.

Limo inorgánico[4]

Polvo de roca, grano 0,002-0,6 mm.

Exceso de limos: puede debilitar el superadobe, empobrece y debilita la mezcla para muros; para construir con él, el sustrato debe enmendarse con arcilla y arena o estabilizarse con cal —preferible— o cemento (tamaño de partícula menor que la de cemento, que así no puede adherirse a las partículas de limo).

Componente estructuralmente inerte: seco tiene el mismo tacto que la arcilla, pero carece de respuesta activa —no se expande, no se adhiere—.

Pequeñas bolas microscópicas.

Arena[5]

Partículas procedentes de las mismas rocas que las gravas, 0,06-2 mm.

Partículas de varias granulometrías —arenas gruesas y medianas (0,2-2 mm) y finas (0,06-0,2 mm)— y con bordes angulosos proporcionan superficies donde la arcilla se adhiere mejor.

Para construir conviene una mezcla uniforme de arenas de distintos grosores. Las partículas bastas y angulosas se encajan y ofrecen superficies estables para la adhesión de la arcilla.

Arenas angulosas: cuarzosas —cuarzo; arenisca de Canache— y silíceas —silicatos, feldespatos; arena de río—.

Arenas redondeadas: calcáreas —caliza—.

Gravas y gravillas[6]

Partículas de rocas, 2-64 mm.

Gravas hasta 25 mm mezcladas con arenas —para que no haya huecos ni vanos— contribuyen a la integridad estructural de paredes de tierra.

Grava: redondeada y limpia, áridos separados.

Zahorra: picuda y todos los tamaños de árido.

Tamaños de las partículas

Escala granulométrica
Partícula mín. (mm) máx. (mm)
arcillas 0,002
limos 0,002 0,06
arenas 0,06 2
gravas 2 60
cantos rodados 60 250
bloques 250

Cualidades para la construcción con tierra

Áridos: aportan fortaleza y resistencia a la mezcla por el rozamiento y trabazón entre las partículas.

Arcillas: aportan cohesión al ocupar los espacios entre los áridos y aglomerarlos.

Referencias

  • Minke, Gernot (2005) [1994]. Manual de construcción en tierra. Editorial Fin de Siglo. pp. 16–19. ISBN 9974-49-347-1. 
  1. Colaboradores de Wikipedia. Wikipedia, La enciclopedia libre (ed.): «Arcilla». Consultado el 11 de marzo de 2012.
  2. Colaboradores de Wikipedia. Wikipedia, La enciclopedia libre (ed.): «Laterita». Consultado el 26 de mayo de 2012.
  3. Colaboradores de Wikipedia. Wikipedia, La enciclopedia libre (ed.): «Arcilla expansiva». Consultado el 26 de mayo de 2012.
  4. Colaboradores de Wikipedia. Wikipedia, La enciclopedia libre (ed.): «Limo». Consultado el 11 de marzo de 2012.
  5. Colaboradores de Wikipedia. Wikipedia, La enciclopedia libre (ed.): «Arena». Consultado el 11 de marzo de 2012.
  6. Colaboradores de Wikipedia. Wikipedia, La enciclopedia libre (ed.): «Grava». Consultado el 11 de marzo de 2012.